Schröder y Merkel vuelven a enfrentarse
12 de septiembre de 2005En este segundo duelo participaron, además de Schröder por el Partido Socialdemócrata (SPD) y de Merkel por la Unión Cristianodemócrata (CDU), el ministro de Exteriores, Joschka Fischer, por los Verdes; el presidente de la Unión Cristianosocial (CSU), formación hermana de la CDU, Edmund Stoiber; el presidente del Partido Liberal (FDP), Guido Westerwelle, y uno de los dos cabezas de lista del Partido de Izquierda, Gregor Gysi.
Pese a que los últimos sondeos indican que ninguna alianza que no sea una gran coalición entre SPD y CDU/CSU tendría mayoría para gobernar, Merkel y Stoiber expresaron un claro rechazo a esa opción, mientras Schröder dijo favorecer la actual alianza con los Verdes.
"Tengo la impresión -dijo Merkel dirigiéndose a Schröder- de que usted y yo vivimos en dos mundos distintos", mientras Stoiber, a la pregunta de si aceptaría una gran coalición, contestó "no podemos gobernar con los que decimos que lo han hecho mal".
El debate se emitió en diferido a por la primera cadena de la televisión alemana (ARD).
Merkel, que hasta hace poco se presentaba prácticamente como si ya fuera canciller, dijo que "la probabilidad de ganar las elecciones es muy alta". Fischer contraatacó diciendo que "ninguno de ustedes hubiese pensado que estaríamos en la situación actual. Pensaban que ya habían ganado, pero esperemos; quedan seis días".
El efecto Kirchhof
Uno de los motivos de que se haya producido el cambio en los sondeos es lo que Fischer llamó el "efecto Kirchhof", en referencia a Paul Kirchof, el experto que Merkel ha designado como potencial ministro de Finanzas y que ha creado una controversia con propuestas como el impuesto unitario.
Preguntado sobre si con el nombramiento de Paul Kirchhof Merkel le había hecho un regalo, Schröder se negó a considerar positivo algo que, dijo, "no es un regalo para los alemanes". Las dos partes intercambiaron acusaciones sobre sus intenciones en materia fiscal, y, mientras el campo gubernamental evocaba las propuestas de Kirchhof, cristianodemócratas y liberales acusaban al ejecutivo de mantener secreto un programa de austeridad.
Schröder contestó a las acusaciones de que el ministro de Finanzas, Hans Eichel, tiene preparado un plan de recortes del que no se habla en la campaña, diciendo que no tiene nada que ocultar y dio a entender que quien hace correr esos rumores es la oposición.
Las informaciones sobre el plan de austeridad de Eichel se han publicado después de que la izquierda pidiera que Kirchhof haga pública 'la lista' de exenciones fiscales que propone eliminar como compensación al impuesto unitario.
Merkel y Stoiber insistieron en que el plan que quieren aplicar es el de su programa -que se basa en el sistema progresivo- y no las teorías de Kirchhof, aunque la candidata reafirmó su apoyo a éste.
Fischer y Schröder unidos por el poder
La política exterior apenas se tocó, aunque Stoiber mencionó la cuestión de Irak para rechazar las acusaciones de Fischer, quien afirma que, de haber estado en el poder una alianza conservadora-liberal, Alemania habría mandado tropas a ese país.
La actitud de Merkel en el tema de Irak hace pensar -dijo Fischer- que "le falta claridad de juicio y firmeza" para llevar la política exterior del país.
El ministro elogió, en cambio, el liderazgo de Schröder, quien abogó por seguir defendiendo en el mundo el papel de Alemania como potencia media, "que es lo que somos, no más".
Schröder y Fischer se presentaron en el debate como un equipo, después de que el SPD y los Verdes empezaran la campaña cada uno por su cuenta y dando a entender que el proyecto común estaba acabado.
Westerwelle aclaró que para el FDP la única opción es una alianza con la CDU, no una con el SPD y los Verdes. En cuanto a Gysi indicó que su partido aspira a ser una oposición fuerte.