Reino Unido prohíbe exportación de carne por fiebre aftosa
4 de agosto de 2007De este modo, el Ministerio de Agricultura y Ganadería británico se adelanta a la esperada prohibición de exportación por parte de la Unión Europea.
La veda, de carácter inmediato, incluye animales vivos y muertos, carne y leche de ganado vacuno, ovino y porcino.
El primer ministro británico, Gordon Brown, subrayó que el Reino Unido hará todo lo que pueda para evitar que la enfermedad se propague, como ocurrió de forma devastadora en 2001.
UE impone restricciones
Anteriormente, la Comisión Europea había anunciado la imposición de restricciones a las exportaciones de productos cárnicos británicos. El lunes se tomará una decisión sobre la aplicación de medidas de emergencia, indicó el órgano ejecutivo de la Unión Europea (UE), en Bruselas.
Las autoridades británicas se esfuerzan por contener la enfermedad, afirmó Brown. Los expertos se concentran en encontrar el origen del virus. El comité de crisis COBRA, del gobierno, coordina todas las medidas necesarias. Brown sus pendió sus vacaciones y dirige personalmente el comité.
El virus de la fiebre aftosa fue detectado en la noche del viernes en unos 60 animales en una granja en Wanborough, en el condado de Surrey. Se ordenó inmediatamente matar a todo el vacuno de la granja y quemar los cadáveres, según explicó el veterinario jefe de Gran Bretaña, Debby Reynolds. Además, se prohibió el transporte de vacas, ovejas y cerdos en todo el país. Numerosas ferias agrarias han sido suspendidas y se creó una zona de protección en un radio de tres kilómetros alrededor de la granja.
Por otra parte, Japón ya impuso una prohibición a la importación de carne porcina británica. Japón importó en 2006 un total de 737.000 toneladas de carne de cerdo, de las cuales unas 5 toneladas venían de Gran Bretaña.
Esfuerzos por reducir impacto
Este brote de fiebre aftosa es, según las autoridades británicas, el primero desde la epidemia que se produjo en 2001, cuando a partir de un brote en una granja en Gran Bretaña, la enfermedad se propagó por todo el país y partes de Francia y Holanda.
Entonces fueron sacrificados sólo en Gran Bretaña más de seis millones de animales y la Comisión Europea ordenó inmediatamente después de conocerse el brote una prohibición a la exportación de carne británica. Las pérdidas para la economía británica se cifraron en 12,6 millones de euros (17,3 millones de dólares).
El Ministerio de Agricultura británico pidió a todos los ganaderos que observen con atención a sus animales y den parte de posibles síntomas a los veterinarios del centro de crisis. El tiempo de incubación de la fiebre aftosa es variable según el animal. En vacas y ovejas puede ser de hasta siete semanas y en cerdos de casi dos semanas. El agente patógeno no es peligroso para los humanos.