Redes sociales: cuando las mentiras pasan por hechos
El contenido de las redes sociales es el pan de cada día que consume mucha gente. Caricaturistas de todo el mundo, incluyendo a varios latinoamericanos, muestran en una exposición virtual cómo influye en nuestras vidas.
Redes de arrastre
Por lo visto, no hay escapatoria. Los grandes consorcios tecnológicos nos tienen en sus manos. Los teléfonos celulares nos abren, supuestamente, nuevos horizontes. Pero quizás seamos como peces, atrapados en sus redes.
Correo de la antigüedad
Para la generación Alpha (los nacidos a partir de 2010), resulta muy difícil imaginar cómo se podía comunicar antes la gente sin tener computador. El caricaturista vietnamita LAP ofrece su versión de la manera en que los antiguos romanos podrían haber enviado sus mensajes.
Shitstorm, ayer y hoy
En la edad media, los delincuentes eran sometidos al escarnio público, en un cepo colocado en la plaza. La muchedumbre lanzaba huevos o fruta podrida al desdichado. En las redes sociales de la actualidad, se lanzan insultos o calumnias, con similar brutalidad y mayor facilidad. En esta caricatura, de Jan Rieckhoff, de Alemania, un verdugo dice: "Olvida esa cosa antigua, aquí tengo algo mejor".
Sonría, por favor
Todo el mundo se saca "selfies". En cualquier situación se sonríe a la cámara, en lo posible, ante un escenario de fondo espectacular, ya sea un glaciar del Ártico o la Torre Eiffel, en París. El australiano Mark Lynch lo expresó así, en esta caricatura.
Sumido en la red
En la red, un sinfín de informaciones llegan permanentemente a los usuarios. Algunas tienen contenidos perniciosos o, simplemente, falsos. El caricaturista filipino ZACH compara el ciberespacio con un estanque lleno de tiburones, que pueden resultar peligrosos.
La búsqueda
Para el cubano Miguel Morales, estas aguas digitales pueden ser turbias. En el mundo de las redes sociales, no es tan fácil reconocer lo que es verdad y lo que es mentira. Quien quiera asegurarse, no tiene más remedio que emprender la ardua búsqueda de los hechos y la información bien respaldada.
Mentiras que se transforman en hecho
Por absurda que pueda parecer una afirmación, basta con repetirla lo suficiente para que comiencen a surgir dudas. La gente empieza a preguntarse si no habrá algo de cierto en ella. Y así, en algún momento, la gran mentira se transforma en una aparente verdad sólida. Es un método común en las redes sociales y también los populistas suelen utilizarlo.
Caperucita y los lobos
No es fácil mantener la esfera privada en la red. La mayoría de los usuarios no está consciente de cómo se registran y utilizan luego los datos obtenidos en cada una de sus visitas a Google, Facebook y otros. Y, cual Caperucita Roja, caemos una y otra vez en la trampa del lobo. Así lo ve Carlos Amorim, de Brasil.
Y llegó la inteligencia artificial...
Muchas personas ya se sentían inseguras antes de que entrara en escena la inteligencia artificial (KI, en la imagen; o IA, en español). Su aparición complica las cosas, a la hora de buscar la verdad. Con sus continuos avances, la inteligencia artificial puede simular cada vez mejor realidades que no son tales. La confusión está garantizada, a juicio de Arcadio Esquivel, de Costa Rica.
Cuidado con la trampa
Por muy útil que pueda resultar internet, también encierra muchos peligros: fake news, manipulación, mobbing y adicción a un mundo irreal. La gente debe tener conciencia de hasta qué punto está atrapada en las redes sociales. En todo el mundo acecha la trampa, advierte el caricaturista argentino Horacio Petre.