Playas paradisíacas en Europa
Para muchos, el mar y el sol son indispensble para pasar unas vacaciones perfectas. Europa tiene decenas de miles de kilómetros de costa y una gran variedad de playas de ensueño. Les mostramos una pequeña selección.
Algarve, Portugal
Extrañas formaciones rocosas, playas doradas y bahías de ensueño. El Algarve es la región turística más popular de Portugal. Con más de 3.000 horas de sol al año, es una de las zonas preferidas en Europa para ir de vacaciones en la costa. La playa de Castelo, cerca de Albufeira, es ideal para bucear y hacer esnórquel.
Sicilia, Italia
La isla más grande del Mediterráneo atrae a muchos turistas con pueblos medievales y ruinas antiguas. También es un paraíso por sus kilómetros de playas de arena, a menudo desiertas, que se extienden a lo largo de la costa, enmarcadas por acantilados blancos. Como aquí en Eraclea Minoa. La gente puede zambullirse en el mar hasta finales de otoño, porque África está muy cerca.
La costa atlántica, Francia
La ola perfecta para hacer surfing en Hossegor, una playa muy popular entre los amantes de las olas. La pequeña ciudad en la costa atlántica del sur de Francia cuenta con bancos de arena perfectamente rectos y olas de hasta tres metros de altura. Aquí también se llevan a cabo campeonatos internacionales de surf desde la década de 1970.
Creta, Grecia
La isla griega más grande del país atrae con una cultura antigua, y por sus aguas cristalinas y amplias playas, a muchos turistas de todo el mundo. En el extremo suroeste se encuentra la bahía de Elafonissi. La arena de color rosa, así como las conchillas de mar, le dan un toque caribeño a la playa.
Hiddensee, Alemania
Esta isla en el Mar Báltico es a la vez un paraíso natural y un destino vacacional. Los coches están prohibidos, con algunas excepciones. No existen grandes edificios de hoteles. Para explorar Hiddensee, con sus santuarios de aves, los turistas usan bicicletas y carruajes tirados por caballos, o simplemente caminan.
Devon, Gran Bretaña
La costa de Devon es conocida como la "Riviera inglesa". La corriente del Golfo asegura un clima agradable. Hay muchos pequeños complejos turísticos, como Woolacombe: la playa de arena de seis kilómetros de largo rara vez, está llena, ni siquiera en verano.
Mugla, Turquía
En la playa de Iztuzu, en el Mar Mediterráneo, no solo se ralajan los turistas. Las poco comunes tortugas carey también ponen sus huevos aquí. Por esta razón, la playa está cerrada por la noche. En los alrededores de la localidad de Dalyan se pueden visitar tumbas de roca y reliquias arquitectónicas del período del Imperio Romano.
Romo, Dinamarca
La isla danesa de Romo tiene la playa más ancha de Europa: hay que caminar hasta seis kilómetros para llegar al agua. Es más conveniente conducir directamente al Mar del Norte en automóvil, lo que está permitido en la isla. A los amantes del deporte de vela y a los jinetes también les gusta usar la ancha pista de arena de la playa.
Montenegro, la costa adriática
Las playas de arena de Montenegro ya no son un secreto para los turistas. Son casi tan conocidas como las de la vecina Croacia. La playa de Jaz, cerca de la ciudad de Budva, merece una excursión de un día por su casco antiguo y su fortaleza.
El istmo de Curlandia, Lituania
El istmo de Curlandia se extiende 98 kilómetros a lo largo del Mar Báltico. La duna móvil más grande de Europa se eleva cerca del complejo vacacional de Nidden. "Uno cree que estás en el Sáhara", escribió el escritor Thomas Mann sobre su casa de verano en Nidden hace 80 años.
Ibiza, España
Las isla balear es un lugar muy concurrido para los amantes de la escena europea de la música house y tecno. En Ibiza se puede bailar toda la noche y relajarse de día junto al mar. La playa de Benirrás, por ejemplo, es famosa por sus espectaculares puestas de sol.