"¡Paren la guerra!"
21 de marzo de 2003Pocas horas después de comenzada la guerra contra Irak, en todo el mundo empezó una inmensa ola de protesta. Así como en muchas ciudades de Alemania, en Londres, Barcelona, Milán, Atenas, Ginebra, Cairo, Sidney, San Francisco, Ankara, y Estanbul. En estas dos últimas, los manifestantes han quemado la bandera norteamericana, y han tenido enfrentamientos con la policía. En San Francisco, un manifestante se tiró del puente Golden Gate; en Bruselas, las cerca de 3000 personas que se encontraban delante del embajada de los Estados Unidos fueron alejadas por la policía.
Protestas escolares
Una protesta como ésta no la había visto nunca antes una ciudad alemana: en la mañana del primer ataque contra Irak setenta mil escolares se reunieron en la legendaria Alexander Platz, donde comenzaron su marcha rechazando la guerra. Atravesaron la Puerta de Brandeburgo y llegaron hasta las cercanías de la embajada norteamericana para hacer manifiesta su protesta llevando pancartas diciendo: "no a la sangre a causa del petróleo", el clásico "give peace a chance", "Bush, causante de la guerra", "ejército fuera de la región del Golfo".
A su paso se iban uniendo espontáneamente cada vez más personas. Muchachos entre los 12 y los 18 años, con el signo de la paz pintado en los rostros, se acostaron delante del cerco de seguridad, manchados de tinta roja simbolizando su repudio a la muerte de civiles inocentes. La Policía de Berlín hablaba en la mañana de más de doce manifestaciones en toda la ciudad.
Protesta ecuménica
"Impotentes ante el poder humano, confiamos en el poder divino", predicó en la liturgia del mediodía el párroco de la Catedral de Colonia, Rolf Breitenburch. El obispado de Colonia había llamado a una oración conjunta por la paz, pero el público no superó un par de decenas. "En un día normal hay mucha más gente aquí", declaró un empleado de la tan famosa iglesia gótica. Sin embargo, no lejos de ahí más de 3000 escolares hacían manifiesta su protesta contra el conflicto bélico.
"Una guerra preventiva es una agresión, y no puede ser definida como autodefensa", declaró el presidente de la Iglesia Evangélica de Westfalia, Manfred Sorg. Y es que las dos principales Iglesias de Alemania se han unido para rechazar la guerra, y ofrecer a sus feligreses múltiples posibilidades de hacer manifiesto su repudio. Sus puertas estarán abiertas las 24 horas, en Colonia y otras ciudades las campanas doblaron juntas al atardecer. El Obispado colonés, por su parte, llamó a una marcha en silencio, lo mismo sucedió en la ciudad Hamburgo, en Rottenburgo, Stuttgart, así como en Münster y sus alrededores. "Rezaremos por los soldados de ambos lados, por sus mujeres y sus hijos, sus padres y hermanos", añadió Sorg.
Guerra, no gracias
Según la Asociación de Osnabrück por la Paz, 30.000 personas se darán las manos el 29 de marzo entre dos ciudades del norte de Alemania, famosas por haber sido firmado en ellas en 1648 el tratado de paz que puso fin a la Guerra de los 30 años. Entre Münster y Osnabrück debe formarse una cadena humana que, de cerrarse, tendrá 60 kilómetros de largo.
Los sindicatos alemanes hicieron un llamado a cesar de trabajar en protesta por la guerra, y en la ciudad de Potsdam al pie de la estatua al desertor desconocido se organizó una manifestación que no tenía dirigentes, y que alcanzó los 3000 manifestantes. En un letrero se leía "toque el claxon por la paz", y muchos de los autos que se vieron detenidos por la protesta comenzaron a pitar acompañados por los gritos de los manifestantes: "nosotros no callamos cuando caen las bombas".