Mundial de novatos
5 de junio de 2006El de Alemania será un Mundial de novatos. Hasta siete selecciones nacionales (República Checa, Ucrania, Togo, Costa de Marfil, Angola, Ghana y Trinidad y Tobago) debutarán en una fase final de la Copa del Mundo. Desde los años 30, con la celebración de los dos primeros campeonatos (Uruguay 1930 e Italia 1934), no se producía el debut de un número tan elevado de equipos.
Como es evidente, en el primer Mundial todas las selecciones participantes -trece- se estrenaban en el evento. En la segunda edición del campeonato, el número de estrenos fue también considerablemente elevado, con diez nuevos equipos.
A partir de ahí, la mayoría de selecciones comenzó a repetir participación en la Copa del Mundo, y el número de estrenos pasó a oscilar entre uno (en el caso de Brasil 1950, con Inglaterra) y cinco (en Francia 1998, cuando debutaron Croacia, Jamaica, Japón, Serbia y Montenegro y Sudáfrica).
La mayor parte de las novedades que se han producido durante estos años han venido provocadas por la aparición de nuevos países, ya sea fruto de la independencia de antiguas colonias -fundamentalmente en África- o por la desmembración de algunos Estados -es el caso, por ejemplo, de la URSS o Yugoslavia-.
Dos federaciones de reciente creación
El Mundial 2006 no es, en este sentido, una excepción. Dos de las apariciones corresponden a federaciones nacionales de reciente creación, como son la de la República Checa (creada en el año 1994, tras la desmembración de Checoslovaquia) y Ucrania (fundada en el 1991, después de la disolución de la Unión Soviética).
Los checos ya han protagonizado sonadas actuaciones en la Eurocopa (finalistas en 1996 y semifinalistas en 2004), pero hasta ahora se habían visto privados de participar en una fase final de la Copa del Mundo. El talento de la "generación Nedved" y la fulgurante aparición de una nueva hornada de jugadores como Baros, Plasil y Rosicky, sitúan a los checos en el grupo de selecciones destinadas a hacer algo grande en este Mundial.
Mientras tanto, Ucrania jugará el Mundial después de haber visto frustradas sus aspiraciones en las fases de clasificación de Francia 1998 y Corea y Japón 2002. El talento en la delantera es una de las mejores bazas de los ucranianos. A la calidad de Andrei Schevchenko hay que añadir la clase de su complemento en la punta, el delantero del Bayer Leverkusen Andrei Voronin. En un grupo con España, Arabia Saudita y Túnez, Ucrania debería pasar sin problemas a octavos de final.
Cuatro debutantes africanos
Sin embargo, el grueso de equipos debutantes procede de la mayor revolución que ha conocido el fútbol africano en una fase de clasificación para un Mundial. Angola, Costa de Marfil, Ghana y Togo dejaron en la cuneta a tradicionales pesos pesados del fútbol en el "continente negro", como Camerún o Nigeria, que quedaron fuera de la fase final.
De las cuatro selecciones, posiblemente Costa de Marfil y Ghana son las que parten, a priori, con más opciones de protagonizar un buen papel. Subcampeones de la última edición de la Copa África, los marfileños cuentan en sus filas con jugadores de gran nivel y titulares indiscutibles en sus equipos (Didier Droga en el Chelsea, Emmanuel Eboué y Kolo Touré para el Arsenal o Bonaventure Kalou en el París Saint Germain).
Por su parte, Ghana llega al Mundial con su gran estrella, el jugador del Chelsea Essien, como gran referencia. Después de ganarlo casi todo en categorías inferiores -cuenta en sus vitrinas con dos títulos mundiales sub17- ahora llega el turno del debut en una fase final de la Copa del Mundo.
Aunque Togo parte como una de las "cenicientas" del Mundial, la trayectoria del equipo africano en la fase de clasificación para Alemania 2006 no es en absoluto despreciable. No en vano dejó en la cuneta a la gran revelación de Corea y Japón 2002, Senegal. Con el delantero del Mónaco Adebayor como principal figura, Togo parte sin ninguna presión en un grupo que comparte con Francia, Corea del Sur y Suiza.
Angola, el cuarto debutante africano en el Mundial, no cuenta en sus filas con jugadores de renombre. Tan sólo Akwa, ex del Benfica y actualmente en la liga de Qatar, y Mantorras, del Benfica, son relativamente conocidos para el gran público. Si la suerte acompaña, Angola puede tener alguna opción de pasar a octavos. Eso sí, se las tendrá que ver con Portugal, Irán y México.
Trinidad y Tobago, David contra Goliat
Finalmente, Trinidad y Tobago constituye, posiblemente, la nota más exótica del Mundial de Alemania. No en vano es la selección que cuenta con menos posibilidades en las casas de apuestas. Afiliada a la FIFA desde el año 1963, Trinidad y Tobago no había conseguido nunca meterse en una fase final de la Copa del Mundo.
Con un solo jugador "mediático", el veterano ex jugador del Manchester United Dwight Yorke, el conjunto entrenado por Leo Beenhakker parte sin ninguna presión en su primera participación en un Mundial. Puntuar e incluso anotar algún gol ya se considerará un auténtico éxito.