"¿Irak pronto un país fragmentado?"
29 de abril de 2005
El diario austriaco DIE PRESSE, de Viena, escribe: "Grande era la esperanza de que la situación en Irak se normalizara, cuando a fines de enero ocho millones de valientes ciudadanos fueron a votar, a pesar del peligro de ataques terroristas. Pero la euforia se desvaneció rápidamente. Un aporte singular a ello realizaron los representantes populares recién electos, que no lograron formar gobierno durante meses. El gabinete ministerial incompleto presentado ahora por el primer ministro, Ibrahim al-Jaafari, no generará un cambio de ánimo. La cuestión es cómo los chiíes y los kurdos se pondrán de acuerdo con los disgustados sunitas hasta el 15 de agosto acerca de una Constitución, cuando no es posible siquiera formar un gobierno de transición del que forme parte también un ministro de Defensa. Si esas tendencias se profundizan, el Irak estará pronto tan fragmentado como en su tiempo el Líbano".
Un mojón histórico
EL PAÍS, de Madrid, opina: "Si para Estados Unidos, y en general Occidente, un poder representativo en Irak supone un mojón histórico, más lo es para el conjunto de Oriente Próximo que un país árabe vaya a ser dirigido por chiíes, una secta minoritaria del islamismo. El hecho puede resultar incluso más perturbador que el experimento democrático en sí mismo. Este flamante Gobierno y un Parlamento dividido sobre cuestiones fundamentales están emplazados, además, a construir un orden nuevo del que forman parte la reconstrucción económica, la elaboración de una nueva Constitución y la celebración de elecciones este mismo año, de acuerdo con la nueva carta magna.
Los meses venideros van a poner a prueba la teórica condición de unidad nacional del Gabinete, sin la cual la gobernación del caleidoscópico Irak resultará imposible. Como timoneles que son, los chiíes deben diseñar un país en el que haya espacio vital para todos. Eso hace imprescindible la participación de sus otrora dominadores suníes en los ámbitos del Estado. Si lo consiguieran, revolucionarían a la vez Irak y el mundo árabe".
Se ha desperdiciado demasiado tiempo
El diario francés FIGARO, de París, editorializa: "Que haya ahora menos víctimas norteamericanas se debe a que las fuerzas de seguridad iraquíes asumen paulatinamente las tareas de los militares de la coalición. Pero los civiles continúan siendo víctimas de la violencia cotidiana, como lo demuestra el asesinato de un diputado iraquí delante de la puerta de su casa, en Bagdad. Para sacar el país del caos, el gobierno debe abocarse decididamente a sus tareas. En Irak se ha desperdiciado ya demasiado tiempo".
Un ejercicio singular de libertad
El CORRIERE DELLA SERA, de Milán, Italia, escribe: "El nuevo Gobierno surgió con algunas fallas. Renquea y está incompleto. Las expectativas de los chiíes fueron satisfechas y en parte también las de los kurdos. Pero la minoría sunita fue casi excluida. (...) Además falta todavía designar un ministro de Defensa, una figura de importancia central para el resurgimiento del país. No obstante, no deberían olvidarse los aspectos positivos de la formación del gobierno. Muchos observadores en Bagdad subrayan que el debate político entre los tres grandes grupos de población es un experimento singular en lo que se refiere al ejercicio de la libertad.