Francia - Togo: pendiente de un hilo
23 de junio de 2006
Si Francia, que no gana un partido de Copa del Mundo desde que obtuvo el trofeo en su propio territorio hace ocho años, vence a Togo sólo por un gol, su destino dependerá del resultado del otro encuentro del Grupo G entre Suiza y Corea del Sur. Y como si fuera poco, Zidane, quien se retirará luego de la Copa, está suspendido por un partido tras recibir la segunda tarjeta amarilla en el empate 1-1 ante Corea del Sur, que habrá sido el último si los campeones del mundo de 1998 no logran sobrevivir a esta fase.
Pero Francia, cuyo gol ante Corea del Sur fue el primero en un Mundial desde que sorprendió a Brasil con un triunfo 3-0 en la final de 1998, mantiene las esperanzas de llegar a la final del 9 de julio en Berlín.
"Grandes equipos como Italia o Alemania tuvieron malos comienzos y excelentes campañas en el pasado", dijo el delantero Thierry Henry. "Debemos creer en nosotros". En teoría, Francia es lo suficientemente poderosa como para derrotar cómodamente a Togo.
Para Togo una ocasión especial
Pero los debutantes africanos, que ya no tienen posibilidades de pasar a la siguiente ronda, están desesperados por dejar tierras germanas con una alegría luego de una campaña signada por una disputa por los pagos, una crisis con su entrenador y casi un boicot al último partido. "Es siempre especial cuando un equipo africano juega con Francia", dijo el delantero Mohamed Kader Coubadja. "La motivación surge sola", agregó.
El director técnico de Francia, Raymond Domenech, quien no podrá contar no sólo con Zidane sino tampoco con el defensor Eric Abidal por estar suspendido, mantiene la incógnita sobre la alineación que comenzará el encuentro, aunque no le queda otra opción que modificar el equipo.
Se espera que Domenech, cuyo futuro es bastante incómodo si Francia no logra clasificar, opte por un esquema 4-4-2 con David Trezeguet o Louis Saha junto a Henry en el ataque. Mikael Silvestre debería ingresar en reemplazo de Abidal en el lado izquierdo de la defensa, mientras que Lilian Thuram jugará su partido número 117 con la selección y quebrará el récord nacional que comparte con Marcel Desailly.
Thuram es uno de varios jugadores franceses que no sólo ganó la Copa del Mundo en 1998 sino también el campeonato europeo del 2000, y sueña con una gran despedida en su último torneo mundial.
Francia recuperaría el orgullo
Y vinieron a Alemania a recuperar el orgullo luego de que "Les bleus" quedaran eliminados sin una victoria y sin haber convertido un gol en la primera fase del Mundial 2002.
La lista de veteranos de aquella época, que incluye a Zidane, podrían sónar en llegar nuevamente a la final si logran recuperar el espíritu ganador frente a Togo. De lo contrario, deberán preparar las valijas y la cortina caerá sobre la generación más exquisita que jamás haya vestido los colores de Francia.