Faluya recuerda la pesadilla de Vietnam
8 de noviembre de 2004
Tagesspiegel de Berlín: “Podría ser la noticia más sarcástica del día: el Gobierno de Irak impone el Estado de Emergencia. ¿No se encuentra este país en estado de emergencia permanente? No pasa una semana sin que se registren ataques contra el ejército y estaciones de policía, secuestros y decapitaciones. Aún así las últimas jornadas marcan una clara escalada de la violencia. Los bandos se concentran en las próximas elecciones a llevarse a cabo en enero próximo. Estas deberían convertirse en la próxima etapa en el camino hacia la normalidad, lo cual explica también el incremento de los atentados y enfrentamientos, la imposición del estado de emergencia de 60 días y la gran ofensiva en contra de Faluya. Realizar elecciones generales sin romper la oposición general en Faluya sería una receta para el fracaso seguro.”
¿Se puede ganar la guerra contra el terrorismo islámico?
Algemeen Dagblad de La Haya: “Se ha elegido cuidadosamente el momento para el ataque contra Faluya, poco después de la reelección del presidente estadounidense George Bush. Durante el asalto final caerán muchos soldados estadounidenses y por lo mismo es mejor que suceda después de las elecciones y no antes, aún cuando parezca cínico. El presidente estadounidense se siente reforzado en su política de cara a Irak por el mandato que le han entregado los electores. El recuerdo de la pesadilla de un segundo Vietnam va cobrando fuerza. No hay que olvidar además las declaraciones de Bush el verano pasado, cuando por descuido indicó que no se puede ganar la guerra contra el terrorismo islámico.”
Irak se hunde en el anarquismo
Financial Times de Londres: “Los iraquíes tendrán que soportar durante los próximos 60 días detenciones, registros y allanamientos. ¿Situación novedosa? ¿En qué se diferencian las medidas aplicadas por Alaui a la práctica diaria en Irak? De hecho existe una gran diferencia. Estas medidas son una señal de desesperación. Se trata de la confesión declarada de que Irak se hunde en el anarquismo. Aunque la situación era evidente ya desde antes de las elecciones estadounidenses, no se podía aceptar abiertamente. Aún cuando se registre una mejora en los próximos dos meses, qué sucederá a principios de enero cuando se levante el estado de emergencia para realizar las elecciones proyectadas.”