Escándalo al final del partido Suiza-Turquía
17 de noviembre de 2005
Luego del pitido final se produjeron feas escenas de violencia, debiendo los jugadores suizos buscar rápidamente refugio en los vestuarios, ante ataques de jugadores e hichas turcos. Debido a un puntapié recibido en el vientre, el jugador suizo Stéphane Grichtingun debió incluso ser hospitalizado.
Sepp Blätter, el presidente de la FIFA, anunció hoy que ordenará una investigación de los sucesos y no dudará en tomar las medidas procedentes, por duras que éstas sean.
"Temimos por nuestras vidas"
"Lo que sucedió después del partido es un escándalo", dijo Marco Streller, que convirtió el segundo gol para Suiza, en un partido que terminó 4 a 2 a favor de Turquía. Gracias a un 2 a 0 como locatario, Suiza se clasificó igualmente para el Mundial 2006, eliminando a los turcos.
"Temimos por nuestras vidas. Agentes de seguridad y jugadores turcos nos atacaron", agregó el suizo, que juega para el club alemán VfB Stuttgart. Dijo también que uno de los atacantes golpeó a Benjamin Huggel, un compañero de equipo, en la cabeza.
Dos horas encerrados en los vestuarios
Luego de los incidentes, el equipo suizo se encerró durante dos horas en los vestuarios, trasladándose luego al hotel bajo custodia policial.
Blatter, el presidente de la FIFA, él mismo suizo, anunció "duras sanciones". "Lo sucedido me saca de las casillas", dijo en una entrevista con la radio suiza DRS 3. "Lo que sucedió en Estambul nunca antes lo había experimentado".
La FIFA esperará ahora el arribo del informe oficial. Toda persona que sea acusada de irregularidades tiene el derecho de defenderse, dijo Blatter. Pero, agregó, la FIFA tomará las medidas necesarias para castigar a los culpables. Incluso se habla de dejar a Turquía fuera del próximo Mundial.