La tecnología digital facilita el acceso a la historia. Con la realidad virtual, la aumentada y los videojuegos, el pasado se vuelve más tangible. Pero existe el riesgo de distorsionar los hechos, sobre todo en las redes sociales.
¿Puedo usar cadenas de bloques en mi vida diaria? ¿La inteligencia artificial podría acabar con mi puesto de trabajo? Y, ¿cómo funciona el aprendizaje automático?