EE.UU.: miedo a la despedida
16 de junio de 2006
Luchando contra los escándalos en la prensa y dispuestos a ganar el cuarto título del mundo, a los italianos sólo les queda concentrarse en su entrada a cuartos de final. El sábado a las 21:00 (CET) se enfrentarán a los Estados Unidos en Kaiserslautern y hasta entonces sólo se habla de deporte y los escándalos quedan en segundo plano.
Sentencia antes de la final
En Italia se espera una sentencia sobre el caso de los partidos amañados antes de la final del 9 de julio. Con esta decisión, algunos de los grandes equipos de la liga italiana, como el AC Milán o la Juventus de Turín, podrían ser obligados a jugar en categorías inferiores. En ambos equipos juegan muchos de los jugadores que ahora están con la selección en Alemania
Con las continuas preguntas sobre el escándalo, el portero italiano Gianluigi Buffon está algo nervioso. “Es en el momento en el que nos tenemos que concentrar exclusivamente en los partidos. Estamos en un Mundial. ¿No es cierto?” La superestrella Francesco Totti replica enérgicamente:“ El escándalo no nos va a debilitar. ¡Basta!” Incluso el entrenador estadounidense Bruce Arena, de ascendencia italiana, declaró con ironía: “Parece que los italianos están acostumbrados a los escándalos. Y siguen jugando bien. A lo mejor es un escándalo lo que nosotros necesitamos.”
También el seleccionador italiano Marcelo Lippi cree que el ambiente entre los miembros del equipo y en su propio país mejorará. “El partido contra Ghana nos dio impulso. Y queremos mantenernos en esta línea“, asegura el entrenador, que ahora ya tiene a toda la tropa a bordo. Gianluca Zambrotta y Gennaro GAtusso ya están curados de sus correspondientes lesiones, y Totti también está en forma a pesar de su contusión en la tibia.
Como en casa
Sin embargo, Lippi apela a su equipo para que no subestimen a Estados Unidos a pesar de su derrota por 3:0 contra la República Checa. Además, Arena anunció un equipo totalmente nuevo: “No vamos a jugar más con ese once y no vamos usar otra vez esta táctica. Ya la tiré a la basura.”
En Kaiserslautern, o mejor dicho K – Town, los US Boys esperan ser recibidos como en casa. Cerca de 55.000 estadounidenses viven en las cercanías. “Nos alegramos de que vengan los aficionados estadounidenses”, dice Arena.