¿Dónde estaba Ronaldo?

Millones de telespectadores se quedaron sorprendidos al comprobar que el delantero brasileño Ronaldo parecía no estar en el terreno de juego. Después de algunos minutos volvía a aparecer por casualidad en la pantalla y uno se acordaba de que el jugador estaba en la cancha. ¿Qué pasó con Ronaldo? ¿Era él o su hermano gemelo?

El brasileño se movía poco y lentamente. No buscaba el balón, que sólo conseguía tocar cuando le llegaba a los pies. Además no estaba compenetrado con sus compañeros; ni siquiera habló con ellos durante el encuentro. El Ronaldo del martes estaba desmotivado y triste. Parecía ser indiferente a todo lo que ocurría en el campo y el equipo sufrió su ausencia.

Extraño para un jugador que necesita demostrar lo que vale para acallar las voces críticas que lo atormentan desde hace tiempo. Parece que las polémicas sobre su supuesto exceso de peso, la falta de forma y de disciplina, las peleas con la prensa y las malas relaciones con la afición han perturbado sus noches. Ronaldo está pasando por una mala racha.

Ronaldo en el sofá del psicólogo

DW-WORLD se puso manos a la obra para intentar comprender la curiosa conducta de Ronaldo y habló con Michael Kellmann, director del departamento de psicología de la facultad de ciencias del deporte de la universidad de Bochum.

Para el experto, el bajo rendimiento del jugador no se puede explicar aludiendo a que sencillamente es malo o está en baja forma, como la prensa ha dado a entender: "cuando un deportista está bajo presión, no puede sacar a relucir todo el potencial que tiene".

Al hacer referencia al aislamiento y la poca visión de juego de Ronaldo, Kellmann explica a DW-WORLD: "el deportista que está bajo presión sólo se ve a sí mismo, por así decirlo, y no al conjunto su equipo. Entonces no percibe bien las situaciones de juego -posiciones de los compañeros, movimientos estratégicos-. El foco de atención es muy reducido y el jugador no llega a comprender el conjunto, no asimila toda la información que le llega del juego". Nuestro Ronaldo jugó solo.

"La reacción del deportista ante una situación de estrés no es adecuada; o bien es desmedida o no se produce ninguna reacción". Esto último es lo que creemos que le ocurrió a Ronaldo, que parecía estar dormido o en otro planeta.

La presión del aficionado

Ronaldo salió abucheado del campo en el minuto 70; Kellmann nos dice que "posiblemente Ronaldo se sintió herido. Al reaccionar así, el público parte de la base que el deportista no ha jugado bien voluntariamente, pero en realidad quizás Ronaldo no podía dar más de sí". Kellmann se muestra escéptico ante la apreciación del público: "si alguien hace un gol, independientemente de su juego, entonces es el rey de la fiesta. La valoración del rendimiento de un jugador es muy relativa".

Kellmann comenta a DW-WOLRD que quizás la situación de Ronaldo es particular por ser brasileño: "En brasil el fútbol tiene un significado social mas profundo que en otros países como Alemania. La influencia de la opinión pública en temas futbolísticos es muy grande. Puedo imaginarme que el público se siente muy identificado con las figuras del fútbol. Entonces la decepción cuando el jugador falla es mayor y esto aumenta la presión que pueda sufrir el deportista".

Cuando Ronaldo fue cambiado se alejó del césped como un fantasma. Sentado en el banquillo, las cámaras lo enfocan. Lo que se ve es un rostro enfadado, impotente e insatisfecho. Nuestro jugador está estresado. Por eso le enviamos desde aquí un saludo y mucho ánimo para pasar el bache. No hay nada mejor que renacer de las cenizas, como el ave fénix.