Dos finales en el Grupo E
22 de junio de 2006
El jueves por la tarde las calles estarán desiertas en Ghana. Nadie trabajará y todo el país estará sentado ante el televisor. El presidente de Ghana, John Agyekum Kufuor, echó una mano a la afición y dio medio día libre para que puedan ver el partido contra EE.UU. Para ambos equipos, el resultado es la llave para entrar a octavos de final.
Con una victoria sobre Ghana, los hombres de Bruce Arena tienen todavía una oportunidad de seguir en Alemania 2006. Pero mientras los africanos tienen la llave en sus manos, los US Boys dependen también del duelo paralelo en Hamburgo entre la Rep. Checa e Italia. Una victoria italiana y estadounidense los llevarían a la siguiente fase por méritos propios. Italia acabaría con 7 puntos, EE.UU. con 4, y la República Checa y Ghana con 3.
Arena anuncia un fantástico duelo
El entrenador estadounidense no quiere saber nada del partido que se jugará paralelamente en Hamburgo. “Tenemos que ganar”, comenta Arena: “No podemos influir en lo que hagan Italia o la República Checa”. Por eso anunció una auténtica final en el Franken-Stadion. “Será fantástico para los espectadores”, dice el neoyorquino: “entre dos equipos con mucha confianza.”
El entrenador de Ghana, Radomir Dujkovic, no quiere depender de la complicada clasificación del Grupo E en la que tras dos partidos cualquiera puede clasificarse o volverse a su casa. “Seguro que no vamos a jugar por un empate”, aclara el serbio. Si Italia ganase a la República Checa, a Ghana solo le faltaría un punto para entrar en la siguiente fase.
Miedo de Italia
A los tricampeones del mundo les amenaza la vergüenza de caer en la primera ronda si pierden contra los checos y Ghana se impone a EE.UU. Pero la Squadra Azurra va a salir con firmeza en el partido decisivo del grupo. “Hay dos cosas de las que estoy seguro. La primera es que pasaremos. Y la segunda, que el Milán no va a bajar de categoría por un transplante de pelo”, comenta Genaro Gattuso. El centrocampista del AC Milán se refiere así al escándalo que azota el fútbol italiano, en el que se especula que el manager del Milán, Leonardo Meani, prometió un transplante de pelo a un árbitro si pitaba a favor de su equipo.
El seleccionador Marcello Lippi exige una victoria a sus muchachos. Saldrá su equipo preferido menos Daniele de Rossi, suspendido por tarjetas. “Vamos a jugar ofensivos para ganar. Sería muy importante un primer lugar en el grupo”, dice el entrenador pensando en el posible duelo contra Brasil en la siguiente ronda en caso de quedar segundos.
Dos checos suspendidos
Para los checos es mayor el miedo de caer en la primera ronda que el de enfrentarse a Brasil en octavos. El técnico Karel Brückner tendrá que desistir en su alineación de Tomas Ujfalusi y Vratislav Lokvenc, así como del delantero Jan Koller.
Las esperanzas de los checos, que tras una brillante victoria contra EEUU perdieron contra Ghana, están puestas en Milán Barros. El mayor goleador de la Eurocopa 04 volvió a los entrenamientos y espera entrar en la alineación a pesar de, en su opinión, no estar al 100% de sus posibilidades.