¿Cuánto puede ganar un diputado?
6 de octubre de 2012La prensa germana le dedicó sus titulares del 28 de septiembre al anuncio de que Peer Steinbrück aspiraría a la jefatura del Gobierno en nombre de los socialdemócratas; una noticia candente porque muchos lo creen capaz de impedir la reelección de Angela Merkel. Apenas una semana más tarde, la primera plana de los periódicos se ve acaparada por la ola de reproches que azota al economista hamburgués: sus adversarios parecen haber recordado de pronto que él es uno de los diputados que más charlas remuneradas ofrece fuera del Bundestag.
Aunque las actividades extraparlamentarias de Steinbrück ya eran conocidas y ningún legislador niega percibir entradas adicionales de dinero por labores al margen de su cargo –en el Parlamento federal, en sus distritos electorales, en las comisiones o en el Gabinete–, el debate en torno a los ingresos secundarios de los diputados ha vuelto a encenderse. Jochen Bäumel, directivo de la organización Transparencia Internacional, sostiene que el problema no está en sus fuentes de ingreso alternativas, sino en la opacidad de sus declaraciones.
El clamor por mayor transparencia
Bäumel no aprueba la manera en que los parlamentarios alemanes dan a conocer sus entradas adicionales de dinero; a sus ojos, la norma vigente para regular esos ingresos debe ser reformada. “La crítica que nosotros hacemos está dirigida al sistema, no a un funcionario específico”, enfatizó el activista anticorrupción, agregando que la población tiene derecho a saber de dónde proviene el dinero de los políticos y si éstos han adquirido deberes de cara a las personas o instituciones que les pagan.
Aquellos que reciban más de 1.000 euros al mes o 10.000 euros al año, aparte de sus honorarios, suplementos económicos y viáticos como diputados –que, sumados, ascienden a 11.600 euros brutos mensuales–, deben declarar sus ingresos de una manera transparente, explica Bäumel. De momento, los parlamentarios sólo están obligados a informar que sus entradas adicionales de dinero pertenecen al llamado nivel uno (entre 1.000 y 3.500 euros), al nivel dos (hasta 7.000 euros) o al nivel tres (sobre 7.000 euros).
Este modelo no permite saber exactamente cuánto dinero ha ganado un legislador por actividades extraparlamentarias: quien reporta honorarios secundarios correspondientes al nivel tres puede haber percibido 15.000 euros o 250.000. Algunos sugieren dividir el sistema en seis o hasta diez niveles para que sea más exacto. Transparencia Internacional recomienda más bien que todos los diputados declaren sus ingresos adicionales de manera exacta; hasta el último centavo. Otros señalan que es hora de que los miembros del Bundestag den a conocer a sus otros empleadores. Y el político liberal, Burkhard Hirsch, insta a que hagan públicas sus declaraciones tributarias.
Autor: Dirk Kaufmann / Evan Romero-Castillo
Editora: Emilia Rojas Sasse