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Cuando la religión se pone erótica

Luna Bolívar Manaut22 de diciembre de 2005

Por alguna extraña razón, la religión cristiana y el sexo no se llevan bien. Un grupo de jóvenes evangélico-luteranos quiso romper con esta incompatibilidad y el resultado es un calendario con pasajes bíblicos eróticos.

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"¡Desnuda como Dios la creó! ¡Fotos eróticas de la Biblia!"Imagen: Bibelkalender.de

Los obispos católicos ya se han quejado, pero a estos chicos de Núremberg les importa poco. Sólo querían ganar lo suficiente para darle una manita de pintura a las paredes del centro juvenil en el que se reúnen, pero su idea ha causado tanto revuelo que llevan vendidos más de 2.000 calendarios.

La religión al desnudo

Bibelkalender.de
Un poco de carne para hacer más atractivas las historias sagradas.Imagen: bibelkalender.de

Fue en abril de este año cuando los jóvenes del grupo evangélico-luterano de Katzwang, en Núremberg, decidieron recaudar dinero vendiendo entre los feligreses un calendario con motivos bíblicos. Como golpe de efecto empresarial, el almanaque debía narrar las historias sagradas mostrando bellos cuerpos desnudos.

Así, Eva es una joven de 21 años llamada Maria Sidhu, que posa ante la vicaría con todos los encantos al aire, como Dios la trajo al mundo, tapadita con una hoja de parra. Salomé luce un tanga diminuto, la prostituta Rahab espera en ropa interior frente a la puerta de un motel y el rey David es un mirón en una sauna.

Todas estas imágenes han sido captadas e impresas con el beneplácito del cura de la parroquia a la que pertenecen los jóvenes y el visto bueno de sus padres, y son pocos los feligreses que se han quejado.

La Biblia también vende

Die Erschaffung Evas
Ya otros los representaron desnudos.Imagen: Sächsische Landesbibliothek

Para dar conocer su calendario, los chicos decidieron aprovechar las fotos y organizar una exposición. Además, abrieron una página web para poder vender los almanaques también en Internet. En cuanto la noticia de su atrevimiento se propagó, dejó de hacerles falta la publicidad: periodistas de todos los medios hablan de ellos y el calendario se vende de Corea a Estados Unidos.

A los jóvenes todo el revuelo que se ha formado les ha pillado un poco, por decirlo literalmente, con los pantalones bajados. Ahora se pasan el día empaquetando calendarios. Su portal de Internet, recibiendo en tres días, más de seis millones de visitas. Los 3.000 calendarios siguientes ya están prácticamente vendidos y con las ganancias que se pronostican, unos 40.000 euros, podrían renovar toda la iglesia.

Pero con la fama llegaron también las críticas. La parroquia ha tenido que emitir un comunicado en el que se asegura que no se quiso herir los sentimientos religiosos de nadie. Por lo menos, dicen en Núremberg, los chicos han logrado que la gente vuelva a interesarse por la Biblia. Quién sabe: si la Iglesia católica hubiera sabido antes el negocio que estaba dejando escapar…