Bundesliga: Vincent Kompany y su reencuentro con Hamburgo
11 de septiembre de 2025Han pasado casi dos décadas desde que un joven Vincent Kompany llegara al Hamburgo SV para convertirse en uno de los talentos defensivos más prometedores de Europa. Hoy, el belga regresa al Volksparkstadion, pero ya no como jugador, sino como entrenador, en un momento en el que el club portuario vuelve a codearse con la élite luego de siete años fuera de la primera división.
El calendario de la Bundesliga lo empuja a un reencuentro cargado de emociones, nada menos que siendo entrenador del Bayern Múnich.
Kompany y un vínculo marcado por la nostalgia
En 2006, Kompany aterrizó en Hamburgo tras el traspaso de Daniel van Buyten al Bayern. El belga, que ya era titular en Anderlecht y en la selección de su país con apenas 17 años, vivió en Alemania una etapa entre el talento y la tragedia: brilló a ratos, pero las lesiones lo golpearon fuerte y lo privaron de continuidad. Tras dos temporadas, partió al Manchester City, donde se transformó en capitán, símbolo y multicampeón. Fue en el City donde muchos aficionados a este deporte lo vieron consagrarse.
A pesar de todo, Kompany nunca olvidó a Hamburgo. "Era una ciudad estupenda. Siempre quise volver al menos dos veces por temporada", reconoció recientemente. Y ese deseo se cumple en la tercera fecha del campeonato alemán 2025/2026, en una Bundesliga que vuelve a enfrentar al tradicional Hamburgo con los gigantes bávaros.
Hamburgo ante la cruda realidad
Para los hinchas la espera también tiene tintes de recompensa: medirse nuevamente con el Bayern en la máxima categoría, en la Allianz Arena de Múnich. En la ciudad ubicada al norte de Alemania, no obstante, se respira ilusión: desde el mercado pesquero hasta la Reeperbahn -donde incluso The Beatles también vivió su despegue-, el fervor futbolero se mezcla con la nostalgia de aquellos años 70 y 80, cuando el duelo norte-sur decidía campeonatos.
Sin embargo, la estadística reciente es cruel. Los últimos enfrentamientos en la casa del campeón bávaro han dejado un balance siniestro para Hamburgo: cuatro partidos, 0-27 en goles, incluidas dos derrotas por 0-8, las peores de su historia. En este tipo de encuentros la realidad se impone: el Hamburgo no gana en Múnich desde hace más de 18 años.
Aun así, en el vestuario se respira optimismo. "Lo importante es la actitud, porque el miedo y el exceso de respeto no sirven de nada", señaló Stefan Kuntz, director deportivo del club. Incluso los jugadores se aferran a la idea de dar la sorpresa: "Vamos sin presión, no tenemos nada que perder. Si sacamos un empate o incluso una victoria, sería fantástico", dijo Jean-Luc Dompé, atacante francés de 30 años.
La fe de la afición
La confianza, aunque teñida de recuerdos amargos, sigue viva, incluso después del descalabro en el derbi de Hamburgo contra St. Pauli (0-2). Desde el influencer Inkasso Ingo, que alienta con un "aplástalos de una vez", hasta la "abuela del Hamburgo", Eva Stahl, que con humor a sus casi 90 años asegura: "Si yo estoy allí, entonces tienen que lograrlo".
Así, el regreso de Kompany a Hamburgo añade una capa extra de simbolismo a un choque que promete más que tres puntos. Para el club y la ciudad, enfrentarse al Bayern es revivir viejas glorias, desafiar la historia reciente y, quizá, escribir un nuevo capítulo bajo la mirada de un viejo conocido convertido en líder desde la banda.
(dzc)