Brasil gana pero no convence
13 de junio de 2006Brasil comenzó la primera parte haciendo las delicias de todo el mundo menos de los croatas que ni siquiera llegaban a la pelota. Las lindezas técnicas de los brasileros eran exactamente lo que todo el mundo esperaba de la selecao.
Con su armada de lujo, Brasil no paró de llegar a puerta con las geniales construcciones de Ronaldinho por la banda izquierda apoyado por Kaka y Roberto Carlos. Los centrocampistas no tenían otra opción que la de llegar por si mismos a la puerta de Pletikosa porque ni Ronaldo ni Adriano aparecían para terminar las jugadas.
Poco a poco la selección croata fue entrando en el terreno de juego haciendo gala de una organización perfecta que mantenía a raya al ataque brasilero mientras esperaban un contraataque y un fallo defensivo de los cariocas para imponerse en el marcador.
Pero la sorpresa llegó poco antes de salir al descanso, en el minuto 43, cuando Kaka recibió un pase del capitán Cafú y sorprendió a Pletikosa con un disparo con la zurda que entró directamente a puerta ante la atónita mirada de la defensa croata.
Brasil tardó más de lo normal en salir al terreno de juego tras el descanso. Mientras los croatas campaban a sus anchas por toda la cancha, los cariocas no podían concentrarse cometiendo fallos sorprendentes. Entonces vinieron muchas ocasiones que hubiesen sido la ocasión de los croatas para remontar el marcador pero no tuvieron suerte.
Pasarían los primeros 15 minutos de la segunda hasta poder decir que Brasil estaba otra vez con los pies dentro del terreno de juego. Desde entonces, se limitó a mantener el marcador con el mínimo esfuerzo. Pero no fue hasta la entrada de Robinho en sustitución de Ronaldo cuando Brasil comenzó a dar el segundo espectáculo. Durante todo el juego anterior, Ronaldo había permanecido arriba esperando la pelota sin moverse un metro del sitio y sin siquiera tocar balón. La única vez que se le vio actuar fue al disparar un balón que salió fuera a 20 metros de la portería.
Una vez solucionado el problema, Robinho entró fresco y con ganas y ambición para la selección brasileña. Desde entonces Brasil encerró de nuevo a los croatas en su feudo mientras estos trataban de contener los ataques.
Al final, Brasil no resultó ser la selección que todos esperaban y se presentó en este Mundial con muchos problemas que seguramente Parreira trabajará en el transcurso de la competición. Fuera de la calidad individual de los jugadores, faltaba la organización táctica que le sobraba a la selección croata.