Australia
7 de junio de 2005
Luego del "Mini Mundial", Australia debe ganar los dos partidos contra las islas Salomón. Para clasificarse para el Mundial sólo le faltaría entonces imponerse también en los partidos contra el quinto del grupo Sudamérica. Luego de ganar la Copa de Oceanía, Australia se mide ahora nuevamente con los "grandes" del fútbol mundial. Ya en el primer partido se topa con el tricampeón mundial y anfitrión, Alemania.
Importante como preliminar del Mundial
Para el seleccionador nacional, Frank Farina, lo importante es el aspecto preparatorio: "No se trata de ganar el torneo. Pero la Copa Confederaciones tiene para nosostros una inmensa importancia. El torneo se disputa en junio y en noviembre tenemos las eliminatorias decisivas". Está claro que la Confederaciones le proporciona a Australia importantes partidos preparatorios contra fuertes adversarios. Farina se mudó incluso a Londres, para poder observar mejor a sus pupilos, que juegan mayoritariamente en la Premier League inglesa.
Despertar el entusiasmo de la afición
En agosto se da en Australia el puntapié inicial para una liga propia de fútbol: una buena razón más para publicitar un deporte que el país es más bien marginal. Ello también es necesario, ya que el rugby y el criquet continúan siendo los deportes más populares. Desde la fundación de la Asociación Australiana de Fútbol, en 1961, este deporte ha hecho progresos, pero a paso lento. La selección quiere despertar, con éxitos, el entusiasmo de más aficionados. (mu)