Alemania: ¿nueva crisis presupuestaria?
6 de mayo de 2004En el peor de los casos, el gobierno federal tendrá que financiar este año un déficit de 18.000 millones de euros y el próximo, de 15.000 millones. Así lo hizo público Antje Hermenau, experta en presupuesto de los "Verdes", partido en el gobierno de coalición junto con los socialdemócratas.
Las cifras se basan en evaluaciones preliminares de una comisión encargada de estimar los ingresos del Estado. El retroceso de los ingresos se atribuye a la reforma impositiva y la débil coyuntura económica.
El impulso que no llega
Con una reducción de la carga impositiva, el gobierno había intentado dar impulsos a la economía. La idea básica es que si los consumidores tienen más dinero a disposición, aumenta el consumo. Más consumo supone a su vez mayor producción, un aumento del PIB y por ende nuevamente mayores ingresos impositivos.
Por otra parte, una reducción de los impuestos a las empresas hace aumentar sus beneficios. Éstos acrecientan los atractivos de la actividad empresarial, impulsan las inversiones y hacen subir la producción.
Hasta allí la teoría. El problema es que los impuestos han bajado, por lo tanto se han reducido los ingresos del Estado, pero la actividad económica continúa desganada: para este año se estima un crecimiento del PIB del 1,5%. Si bien es mejor que nada, no basta para cerrar la brecha abierta en los ingresos por la reforma impositiva.
En caso de que todo salga mal
Los déficits de 18.000 y 15.000 millones de euros pueden registrarse sólo en el caso de que todo salga mal y los ingresos impositivos se reduzcan dramáticamente, resaltó Hermenau.
Más realista es la perspectiva de que este año "sólo" falten 10.000 millones de euros, de los cuales la mitad tendría que ser financiada por el gobierno federal y la otra mitad por cada uno de los "Länder" (Estados federados) y los municipios.
Si, en caso de registrarse, el temible maxi déficit no es compensado con ahorros, sino tomando créditos, el nuevo endeudamiento podría alcanzar la cifra de 48.000 millones de euros, lo que constituiría un récord del último medio siglo, advirtió Hermenau. Prevista está hasta ahora una nueva deuda de 29.300 millones.
Cada uno por su lado
Con esta última cifra, el gobierno federal pensaba también cumplir con el criterio de Maastricht de que la deuda nueva no pase del 3% del PIB. Si los ingresos disminuyen tan dramáticamente como algunos temen, también podría fallar el logro de ese objetivo.
El ministerio de Finanzas le salió al paso a esas ideas en voz alta. "La deuda nueva bien puede limitarse a 29.300 millones de euros. Actualmente no vemos motivo alguno para poner en duda esa cifra. Los datos que proporcionó Hermenau no son serios", dijo un vocero del ministerio.
Si así es, un observador desprevenido está tentado naturalmente de preguntarse por qué una integrante de la coalición de gobierno, la experta "verde" en presupuesto, pone en aprietos sin verdadera razón a otro miembro de la misma coalición, el ministro de Finanzas. Al fin y al cabo, todavía nada se sabe a ciencia cierta.
La cacofonía parece ser, sin embargo, una característica de la fase actual de un gobierno que debe batirse en varios frentes: el problema presupuestario, la falta de dinámica económica y la desocupación. Para muestra basta un botón: recientemente, el ministro de Economía dijo que se podía eliminar el monto libre de impuestos que gravan los intereses devengados por ahorros. Al otro día, el canciller Federal manifestó que "de ninguna manera".