¿Por qué limitar una finca a un solo tipo de cultivo, cuando se pueden obtener de él diversos productos agrícolas? Esa es la meta de la llamada "perma-agricultura", una práctica en la que varios cultivos y actividades de un predio se complementan entre sí para diversificar la producción. Es un enfoque aplicado en la región andina argentina, también con técnicas japonesas y egipcias.